UNESCO es la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. Su misión es promover la paz y los derechos humanos a través de la educación, la ciencia y la cultura. Uno de sus principales objetivos es garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa para todos.

Sin embargo, según informes y datos de la UNESCO, muchas escuelas de todo el mundo siguen sin ofrecer las mismas oportunidades a todos los alumnos. Esto significa que millones de niños y jóvenes están excluidos de la educación o no reciben una educación de calidad debido a su sexo, orientación de género, origen étnico o social, idioma, religión, nacionalidad, situación económica o capacidad.

Algunas de las razones por las que las escuelas no han conseguido ofrecer igualdad de oportunidades para todos son:

- Falta de acceso: muchos niños y jóvenes se enfrentan a obstáculos para acceder a la educación debido a la pobreza, los conflictos, los desplazamientos, la discapacidad o la discriminación. Por ejemplo, hay 244 millones de niños y jóvenes sin escolarizar en todo el mundo, y entre 93 y 150 millones de niños viven con una discapacidad.

- Falta de inclusión: Muchas escuelas carecen de políticas y prácticas inclusivas que respeten la diversidad y atiendan las necesidades de todos los alumnos. Por ejemplo, 335 millones de alumnas carecen de los requisitos mínimos de agua, saneamiento e higiene, y los niños tienen un 30% más de probabilidades de leer al final de la primaria si aprenden en su lengua materna.

- Falta de calidad: Muchas escuelas no imparten una educación de calidad que dote a los alumnos de conocimientos, habilidades y valores relevantes para la vida y el trabajo. Por ejemplo, según los últimos datos disponibles del Instituto de Estadística de la UNESCO (IEU), más de la mitad (53%) de los niños de los países de renta baja y media no saben leer correctamente a los 10 años.

La UNESCO afirma que las escuelas han fracasado a la hora de ofrecer igualdad de oportunidades para todos, porque considera que cada alumno importa por igual. También cree que la educación es un derecho humano básico que sirve para sacar a hombres y mujeres de la pobreza, nivelar las desigualdades y garantizar el desarrollo sostenible.

Por ello, la UNESCO trabaja con gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, socios del sector privado y otras partes interesadas para mejorar el acceso, la inclusión y la calidad de la educación para todos. Algunas de sus acciones son:

- Abogar por el compromiso político y la financiación de la educación a escala nacional e internacional.

- Supervisar los avances y los retos en la consecución de los objetivos educativos mundiales a través de su Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (GEMR).

- Proporcionar asistencia técnica y asesoramiento político para ayudar a los países a desarrollar y aplicar políticas y planes educativos inclusivos y equitativos.

- Elaborar normas y estándares sobre cuestiones clave como la igualdad de género, las lenguas en la educación, la inclusión de las personas con discapacidad, la alimentación escolar, la atención y educación de la primera infancia, etc.

- Apoyar la innovación y la investigación sobre pedagogías, planes de estudio, métodos de evaluación y entornos de aprendizaje eficaces para alumnos diversos.

- Promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos a través de vías de aprendizaje formales, no formales e informales.

- Mejorar la cooperación y el diálogo entre los diferentes actores y sectores implicados en la educación.

La UNESCO espera que, al afirmar que las escuelas no han logrado ofrecer igualdad de oportunidades para todos, pueda sensibilizar sobre la urgencia y la importancia de abordar esta cuestión. También espera que pueda inspirar la acción de todas las partes interesadas para garantizar que nadie se quede atrás en la educación.